Era un profesor comprometido y estricto, conocido también por sus alumnos como un hombre justo y comprensivo.
Al terminar la clase de fin de curso, mientras el maestro organizaba unos documentos encima de su escritorio, se le acercó uno de sus alumnos y en forma desafiante le dijo:
– Profesor, lo que me alegra de haber terminado la clase, es que no tendré que escuchar mas sus tonterías y podré descansar de ver su cara aburrida.
El alumno estaba erguido, con semblante arrogante, en espera de que el maestro reaccionara ofendido y descontrolado.
El profesor miró al alumno por un instante y en forma muy tranquila le preguntó:
– ¿Cuando alguien te ofrece algo que no quieres, lo recibes?
El alumno quedó desconcertado por la calidez de la sorpresiva pregunta.
– Por supuesto que no. -Contestó de nuevo en tono despectivo el muchacho-.
– Bueno, -prosiguió el profesor- cuando alguien intenta ofenderme o me dice algo desagradable, me esta ofreciendo «algo».
En tu caso, es una emoción de rabia y rencor, que puedo decidir no aceptar.
– No entiendo a que se refiere. -dijo el alumno confundido-
– Muy sencillo, -replicó el profesor- Tú me estás ofreciendo rabia y desprecio y si yo me siento ofendido o me pongo furioso, estaré aceptando tu regalo.
Y yo, mi amigo, en verdad, prefiero obsequiarme mi propia serenidad.
-Muchacho!, -concluyó el profesor en tono gentil- La vida nos da la libertad de amargarnos o de ser felices.
«Tu rabia pasará, pero no trates de dejarla conmigo, porque no me interesa».
Yo no puedo controlar lo que tú llevas en tu corazón, pero de mi depende lo que yo cargo en el mio.
Cada día, en todo momento, tu puedes escoger que emociones o sentimientos quieres poner dentro de ti, y lo que elijas, lo tendrás hasta que decidas cambiarlo, porque es tan grande la libertad que nos da la vida, que hasta tenemos la opción de «amargarnos o de ser felices».
Recibido por correo.
¿este tipo de didáctica en que planeta es? estás hablando de los chavales de hoy en día? y encima en una situación violenta? con 30 chavalillos en clase, observando como se defiende el profesor para tirarse posteriormente a su yugular? la bella y hermosa irrealidad de los correos electrónicos que solucionarían los problemas del mundo entero… ainssss….
Este proverbio con el que terminas la entradita es algo que me parece muy muy cierto.
Es una idea que tengo desde siempre y que si en algún momento la he compartido con mi gente, se me han echado encima diciendo que no tengo razón, que si fuera como yo digo nadie sufriría depresiones…
No sé, yo sigo pensando que uno consigo mismo puede hacer muchas más cosas de las que cree, entre ellas la opción de amargarse o no por las cosas que le pasan en la vida.
No es un regalo maravilloso el que la vida nos dió, ese que muchas veces ignoramos y que es tan real como fantástico, ese regalo llamado, el libre albedrio?. Yo elijo amargarme o no. Ojalá y todo el mundo lo pusiera en práctica.
Buen sabor de boca me has dejado Emilio, …estoy empezando el domingo y siempre es muy grato iniciar con realidades…
Ojalá siempre pensemos asi…
Como va la obra??….
besitos
Seguro que le habían suspendido…, gracias. Espero verte por aquí en el suiguiente curso. Saludos.
Suelen darse casos similares con cierto tipo de alumnos, sobre todo en sociedades de bajo nivel económico y ambiente enrarecido, pero si no das importancia al hecho y sigues actuando de manera justa y como si no hubiera pasado nada, al final acabas tomándote una cerveza con ellos y siendo más responsables que mucho de sus compañeros.
Hablo de niños de un colegio de educación especial , niños dificiles y con problemas familiares muy gordos edades comprendidas entre 15 y 18 años. Tan dificiles que uno me amenazó esperarme en la puerta del colegio con una navaja, le di yo la mia, no pudo cogerla, a los pocos días , se acercaron a mi para invitarme a una cerveza: De todo hay en la viña del Señor. Un saludo Nina
:S:S uff eso suele pasar pero todo depende de la persona que se encuentre frente a un grupo de niños o sea del profesor, a mi no me a pasado gracias a Dios 🙂 y yo lucho porque eso no pase;) hasta pronto. Buen fin de semana
Jio Para realidades cotidianas ya tenemos bastantes en las aulas, pero no todos se comportan de la misma forma y aunque solamente sirviera para apaciguar los ánimos en algún caso ya me daría por satisfecho.
Lucía En ocasiones y no necesariamente en las aulas es preferible no contestar a una persona que viene con ánimo de gresca y pasar de él olímpicamente ya que a veces el diálogo va subiendo de tono y se termina diciendo lo que en otra ocasión y con el ánimo calmado no se hubiera dicho.
Jone Miren Reconozco que muchos de los correos que recibo no son ciertos, pero de todos ellos se saca una moraleja, o por lo menos es lo que yo pretendo.
mnkantavivir Me alegra que te gustara aunque…
La obra va lenta pero segura, el problema es que al principio solo era la cocina, ahora es toda la casa.
Besitos
Tbo Fin de curso, las notas quizá ya estuvieran ¿quién sabe lo que realmente hubiera pasado?
Nina Si, el mayor problema se suele dar en ambientes de bajo nivel económico. Tu comentario me ha recordado la famosa copla del jotero José Oto:
No tires piedras, cobarde,
que el tirar, es cobardía,
saca tu navaja en mano,
que yo sacaré la mía.
Besitos
Betty Deseo de todo corazón que no te pase, ya que una cosa es comentarlo y otra muy distinta vivirlo
Un abrazo
Buena lección, lo que demuestra que ese era un buen profesor de los que deberían de abundar mucho más.
Un abrazo
Leodegundia Por desgracia los profesores así no abundan, ni posiblemente la situación que aparece en el post, seguro que hoy en día hubiera sido más violenta.
Un abrazo