Jotas entre vallas y mascarillas

Mientras, sonaban ‘Los Sitios de Zaragoza’ en el escenario, de la actuación de Blasón Aragonés. Los jóvenes ponían rasmia* y ganas para interpretar una de las jotas más conocidas. Entre el público, los familiares aplaudían con entusiasmo al final de cada actuación. Maruja Gimeno miraba orgullosa a su nieto al que no veía bailar desde hace dos años. “Voy siempre a verlo”, ha dicho, flanqueada por Lucía y María Casanova, prima y hermana el jotero. Algunos familiares se han quedado sin entrada este año.

El Sitio de Zaragoza de Christobal Oudri interpretado por la Orquesta Internacional de Praga en el Auditorio de Zaragoza el 13 de octubre de 2008.

* ‘Rasmia’ es un término que se usa principalmente en Aragón y en Navarra, y que la Real Academia de la Lengua (RAE) la define como: empuje y tesón para acometer y continuar una empresa.

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12 respuestas a Jotas entre vallas y mascarillas

  1. Frajayo dijo:

    Me quedo con un palmo de narices, tras oír a la Orquesta Internacional de Praga su discreta interpretación de Los sitios de Zaragoza, esperaba zambullirme en los compases de la vibrante jota, pero la jota ¿donde está? En el mismo cuerpo de la ‘Los sitios’ No.

    • unjubilado dijo:

      -Frajayo- Tienes razón el titulo en realidad no tiene nada que ver con la fantasía descriptiva de los asaltos sufridos en Zaragoza durante la guerra de la independencia. Lo siento

  2. Rasmia a arrobas contino, que astí no se rebla.
    Felicísimas No Fiestas, Emilio.

  3. Laura.M dijo:

    Pues hoy aprendí una palabra nueva. Que siempre tangamos esa rasmia para seguir.
    Buen día del Pilar Emilio.
    Un abrazo.

  4. Ester dijo:

    Mi padre escuchaba <escuchábamos) muchas veces El sitio de Zaragoza, las notas ya te he comentado que me gustan, hubo un tiempo que las escuchaba en directo. Iré escuchando los vídeos., Ahora estoy con el móvil. Un abrazo

    • unjubilado dijo:

      -Ester- Hace muchos años, el sitio de Zaragoza me sirvió para que por la noche personas que llegaban a casa chillando, hablando en voz muy alta, les parara los pies poniendo un altavoz al lado de su tabique y no hubo más riñas ni voces altas a lo largo de nuestra vida en nuestra antigua vivienda. Los graves hacía que vibraran los tabiques.
      Un abrazo

  5. ester dijo:

    He venido a leer mi comentario y veo que hay varias entradas en las que no he comentado pero que lei enlazadas, pensé que era una sola (es lo que tiene hacerlo desde el móvil) Un abrazo

    • unjubilado dijo:

      -ester – Tengo pendiente una entrada sobre la Dolores pero es muy larga, por ello he querido separarla con la visita a las ferias.
      Un abrazo.
      P.D. Yo con el móvil, no me aclaro.

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